Lo que creemos que la segunda parte - los puntos doctrinales 16-28

Añadido: 11.04.2011
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Temas: Los hechos bíblicos

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16 La Cena del Señor - La Cena del Señor es una participación en los símbolos del cuerpo de Jesús y su sangre como una expresión de fe en Él, nuestro Señor y Salvador. La experiencia de la comunidad está en Cristo, que se reúne con su pueblo y lo fortalece. Al participar, proclamamos gozosamente la muerte del Señor hasta que Él venga. Preparación para la Cena incluye un examen, el arrepentimiento y la confesión. Cristo instituyó el lavamiento de pies como un símbolo de una nueva limpieza y expresar la voluntad de servir con humildad cristiana, y unir nuestros corazones en el amor. Cena puede estar abierta a todos los creyentes cristianos.

(1 Cor 10,16.17, 11,23-30, Mateo 26,17-30, Apocalipsis 3:20, Juan 6,48-63; 13,1-17)

17 Los dones espirituales y el ministerio - Dios concede a todos los miembros de la Iglesia en todas las épocas, dones espirituales que cada miembro se va a utilizar en el servicio del amor por el bien común de la Iglesia y la humanidad. El Espíritu Santo, que distribuye a cada miembro según su voluntad, los dones proveen todas las aptitudes y ministerios que la Iglesia necesita para cumplir sus divinamente ordenado. Según las Escrituras, estos dones incluyen: la fe, la sanación, la profecía, la proclamación, la enseñanza, la administración, la reconciliación, compasión, servicio abnegado y caridad para la ayuda y el aliento de la gente.

Algunos miembros son llamados por Dios y dotados por el Espíritu para cumplir con los ministerios pastoral, evangelizadora y apostólica, y enseñanza, particularmente necesarios para equipar a los miembros de servicio, para edificar la iglesia a la madurez espiritual, y para promover la unidad de la fe y el conocimiento de Dios . Cuando los miembros emplean estos dones espirituales como fieles mayordomos de la multiforme gracia de Dios, la iglesia es protegida de la influencia destructiva de la falsa doctrina, Dios crece y se desarrolla con el crecimiento en la fe y el amor.

(Romanos 12,4-8; 12,9-11.27.28 1 Corintios, Efesios 4,8.11-16, Hechos 6,1-7; 1 Timoteo 3,1-13, 1 Pedro 4,10.11)

18 don de profecía - Uno de los dones del Espíritu Santo es el don de la profecía. Este don es una iglesia remanente. La Escritura es una medida que debe ser considerado todos y cada experiencia de aprendizaje.

(Joel 2,28.29; Hechos 2,14-21; Hebreos 1:1-3, Apocalipsis 12.17, 19:10)

19 de la ley de Dios - grandes principios de la ley de Dios tal como se expresa en los Diez Mandamientos y de Cristo Jesús es concebido de su vida. Expresan el amor de Dios, la voluntad y las intenciones con respecto a la conducta humana y las relaciones, son vinculantes para todas las personas en todo momento. Estos comandos son la base del pacto de Dios con su pueblo y la medida de la prueba. Espíritu Santo revela el pecado y despiertan la conciencia de las necesidades del Salvador. La salvación es sólo por la gracia, no por obras, pero su fruto es la obediencia al mandamiento. Esta obediencia desarrolla el carácter cristiano y da la satisfacción interior. Es una expresión de nuestro amor por el Señor y nuestra preocupación por el prójimo. La obediencia de fe demuestra el poder de Cristo para transformar vidas, y por lo tanto aumenta el testimonio cristiano.

(Éxodo 20:1-17, Salmo 40,8.9, Mateo 22,36-40, 28,1-14 Deuteronomio, Mateo 5,17-20; Hebreos 8,8-10; Juan 15,7-10; Efesios 2 ,8-10, 1 Juan 5.3, Romanos 8,3.4, Salmo 19,8-15)

20 sábado - Clemente Creador de los seis días de la creación y descansó el séptimo día, y el sábado para todos los hombres como un monumento de la creación. El cuarto mandamiento de la ley inmutable de Dios requiere la observancia del séptimo día como día de descanso, adoración y servicio, de acuerdo con las enseñanzas y el tiempo de Jesucristo, el Señor del sábado. El sábado es un día de comunión gozosa con Dios y con otros creyentes. Es un símbolo de nuestra redención en Cristo, una señal de nuestra santificación, un signo de nuestra devoción a Dios y anuncia un futuro en el reino eterno de Dios. El sábado es un signo permanente de la alianza eterna entre Dios y su pueblo. Observancia gozosa de este tiempo santo de tarde a tarde (de puesta a puesta del sol) es una celebración de Dios y su obra creadora y redentora.

(2,1-3 Génesis, Éxodo 20,8-11 Lucas 4,16; Isaías 56,5.6, 58,13.14, Mateo 12,1-12; Éxodo 31,13-17; Ezequiel 20,12.20, Deuteronomio 5, 12 - 15; Hebreos 4,1-11, Levítico 23.32, Marcos 1.32)

21 Mayordomía Cristiana - somos los administradores de Dios, Dios nos ha confiado con el tiempo y oportunidades, capacidades y posesiones, los dones de la tierra y los recursos naturales. Somos responsables ante Dios por su uso apropiado. Reconocer la propiedad de Dios, de servicio fiel a Dios y al prójimo, la mano sobre los diezmos y donaciones voluntarias para la proclamación del Evangelio y la promoción y el desarrollo de la Iglesia. mayordomía cristiana es una prioridad que Dios nos ha dado para crecer en el amor y la victoria sobre el egoísmo y la codicia. Cristiano es feliz cuando los demás se han beneficiado de su gestión fieles.

(Génesis 1,26-28, 2:15, 1 Crónicas 29.14; 1,3-11 Ageo, Malaquías 3,8-12, 9,9-14 1 Corintios, Mateo 23.23, 2 Corintios 8,1-15; Romanos 15,26.27)

22 La manera cristiana de la vida - Estamos llamados a vivir piadosamente las personas que piensan, sienten y actúan de conformidad con los principios de la Escritura. Para que el Espíritu Santo en nosotros el carácter de nuestro Señor debemos envolvernos en lo que la pureza de Cristo, la salud y el disfrute de la vida. Esto significa que nuestro entretenimiento y actividades de ocio con los más altos estándares de buen gusto y belleza cristianos. Sin dejar de reconocer las diferencias culturales, nuestra vestimenta debe ser simple, modesto y limpio, corresponde a aquellos cuya verdadera belleza no consiste en el adorno exterior, sino en la belleza de un espíritu afable y apacible.

Esto significa que tenemos que cuidar de su cuerpo como el templo del Espíritu Santo. Junto con el ejercicio y el descanso adecuados, que proporcionan al cuerpo con la dieta más saludable posible y abstenernos comidas a las identificadas en las Escrituras como impuro. Las bebidas alcohólicas, el tabaco y el uso irresponsable de las drogas y narcóticos son dañinos para nuestro cuerpo, por lo que no lo utilice. En cambio debemos ocuparnos en todo lo que ponga nuestros pensamientos y cuerpos en la disciplina de Cristo, quien quiere que gocemos, la alegría y la felicidad.

(12,1.2 Romanos, 1 Juan 2,6; Efesios 5,1-21, Filipenses 4,8; 2 Cor 10,5;. 6,14 a 7,1, 1 Pedro 3,1-4, 1 Cor 6,19.20, 10.31, Levítico 11, 1-47, 3 Juan 2)

23 Matrimonio y la Familia - El matrimonio fue divinamente establecido en el Edén y el Señor Jesús se confirma como una unión permanente entre un hombre y una mujer en amante compañerismo. Cristiano el compromiso de matrimonio es a Dios, así como su compañera de vida. El matrimonio cristiano debe ingresar sólo por la gente de la misma religión. El amor mutuo, el honor, el respeto y la responsabilidad son la trama de este volumen para reflejar el amor, la santidad, la intimidad y la permanencia de la relación entre Cristo y su iglesia. Sobre el divorcio, Jesús enseñó que el que repudia (con la excepción de la pareja fornicación) y celebrar un nuevo matrimonio, cometiendo adulterio.

Aunque algunos lazos familiares son ideales para las parejas que están en Cristo entregado el uno al otro, que el Espíritu Santo y la Iglesia para lograr la unidad del amor. Dios bendiga a la familia y tiene la intención de que sus miembros se prestarán asistencia mutua hacia la madurez completa. Los padres deben alentar a sus hijos a amar y obedecer a Dios. Con su ejemplo y sus palabras para enseñar que Cristo es un amor, siempre amable y cariñoso, que deseen convertirse en miembros de su cuerpo, la familia de Dios. El fortalecimiento de la cohesión de la familia es uno de los objetivos del mensaje del evangelio por última vez.

(Génesis 2,18-25, Mateo 19,3-9; Juan 2,1-11; 2 Corintios 6,14; Ef 5,21-33, 5,31-32 Mateo, Marcos 10,11.12 Lucas 16, 18, 1 Corintios 7,10.11, Éxodo 20.12, Efesios 6,1-4, Deuteronomio 6,5-9, Proverbios 22.6, Malaquías 4,5.6)

24 ministerio de Cristo en el santuario celestial - El cielo es el santuario, el verdadero tabernáculo que el Señor, y no el hombre. En él Cristo ministra en nuestro favor, lo que hace la bendición a disposición de los creyentes sacrificio ofrecido su expiación una vez por todas en la cruz. Cristo fue inaugurado como nuestro gran Sumo Sacerdote y comenzó Su ministerio de intercesión después de su ascensión. En 1844, al final del período profético de los 2.300 días (años) pasó la segunda y última fase de su ministerio expiatorio. Es una obra de corte investigativo que forma parte de la disposición final de todo pecado. Tipificado por la purificación del antiguo santuario hebreo en el Día de la Expiación.

En ese servicio típico del santuario era lavado con la sangre de los sacrificios de animales, pero las cosas celestiales se purifican con el perfecto sacrificio de la sangre de Jesús. La investigación de la Corte revela a los seres celestiales quien entre los muertos duermen en Cristo y por lo tanto, se reconoce como digno de compartir en la primera resurrección. El tribunal también indica cuál de los vivientes están morando en Cristo, guardando los mandamientos de Dios y la fe de Jesucristo y que está listo para ser trasladados a su reino eterno. El Tribunal de Justicia defiende la justicia de Dios al salvar a los que creen en Jesucristo. Declara que los que permanecieron leales a Dios recibirán el reino. La terminación del ministerio de Cristo en el santuario celestial para el pueblo antes de la segunda venida significa el fin del período de gracia.

(Hebreos 8,1-5, 4,14-16, 9,11-28, 10,19-22, 1,3, 2,16.17, Daniel 7,9-27, 8,13.14, 9, 24-27 ; números 14,34; 4,6 Ezequiel, Levítico 16; Apocalipsis 14,6.7, 20.12, 14.12, 22.12)

25 La Segunda Venida de Jesucristo - La Segunda Venida de Jesucristo es la esperanza cristiana de la Iglesia, el clímax de la famosa evangelio. La venida del Salvador será literal, personal, visible, y en todo el mundo. El regreso de Cristo a los justos muertos serán resucitados y juntos con los vivos justos serán glorificados y llevados al cielo, pero los injustos morirán. Llenado la mayor parte de las profecías y el estado actual del mundo sugieren que la venida de Cristo está cerca. Dios no ha revelado la fecha de este incidente, pero nos anima a estar listo.

(Tito 2.13, 9.28 Judios, Juan 14:1-3, Hechos 1,9-11; Mateo 24.14, Apocalipsis 1:7;. Mateo 24,43.44, 1 Tesalonicenses 4,13-18, 1 Corintios 15,51-54 , 2 Tes 1,7-10, 2,8, Apocalipsis 14,14-20, 19,11-21, Mateo 24, Marcos 13, Lucas 21, 2 Timoteo 3.1-5, 1 Tesalonicenses 5,1-6)

26 La muerte y la resurrección - La consecuencia del pecado es la muerte. Pero Dios, el único que es inmortal, otorgará vida eterna a sus redimidos. Hasta la llegada de la muerte del Señor para todos los pueblos del estado de inconsciencia. Cuando Cristo aparece, que es nuestra vida, la resurrección de los justos y los justos vivos serán glorificados y arrebatados para encontrarse con su Señor. La segunda resurrección, la resurrección de los injustos, será de mil años después.

(Romanos 6,23; Timoteo 6,15.16 primero; Predicador 9,5.6, Salmo 146,3.4, Juan 11,11-14; Colosenses 3.4, 1 Corintios 15,51-54, 1 Tesalonicenses 4.13 -17, Juan 5,28.29; Apocalipsis 20,1-10)

27 El Milenio y el fin del pecado - El milenio es el reinado de mil de Cristo con sus santos en el cielo entre la primera y la segunda resurrección. En este momento se los impíos muertos juzgados, la tierra estará completamente desolada, sin habitantes humanos, pero ocupada por Satanás y sus ángeles. En sus cerca de Cristo con sus santos y la Ciudad Santa, descenderá del cielo a la tierra. Luego impíos muertos serán resucitados, y junto con Satanás y sus ángeles rodearán la ciudad de Dios, pero el fuego de Dios los consumirá y purificará la tierra. Así, el universo para siempre libre de pecado y pecadores.

(Apocalipsis 20, 1 Corintios 6,2.3, Jeremías 4,23-26; Apocalipsis 21,1-5; Malaquías 4,1; Ezequiel 28,18.19)

28 Una Nueva Tierra - En la nueva tierra donde habita la justicia, Dios proveerá hogar permanente para los redimidos y un ambiente perfecto para vida eterna, el amor, la alegría y el aprendizaje en su presencia. Dios mismo morará con su pueblo y el sufrimiento y la muerte se han pasado. El gran conflicto terminó, y no peques más. Todo animado y lo inanimado, declararán que Dios es amor. Y él reinará por los siglos.

(2 Pedro 3:13; Isaías 35, 65,17-25, Mateo 5.5, Apocalipsis 21,1-7, 22,1-5, 11.15)

Lo que creemos primera parte - los puntos doctrinales 01.15

1 Escritura - La Biblia, Antiguo y Nuevo Testamento, son la Palabra escrita de Dios. Dada por inspiración divina a través de los santos hombres de Dios que hablaron y escribieron ...